Y los teléfonos arden.
¿Por qué lo haces?
No oyes mis estúpidos gritos, te grito con los ojos.
Miradas felinas.
Harás tu vida en un vaivén de quizases inconclusos que dejaste balanceándose en mis curvas, por falta de valor. Valor. Valor.
Necesito respirar el aire de esas estrellas que retorcíamos felices.
De cuando agasajábamos el tiempo, cuantificando frases con doblesentidos y
te ponías rojo, rojo,
al verme.
Tan, tan nervioso.
Y yo, tan alterada...
Y yo, tan alterada...
Tu voz está tan lejos.
Es tan ténue, tan etérea.
Tangible y a pesar de todo,
la dejo diluirse.
Quiero mantener una imagen nítida de aquella escena de amor platónica que transformaré en delirio psicodélico el día que te olvides de mi.
No te irás ¿verdad?
No puedes irte,
porque estás dentro de mi.
MUY dentro.
No puedes irte,
porque estás dentro de mi.
MUY dentro.
maldita cobardia..
ResponderEliminar(L) para variar, genial
Yo me pongo rojo sólo con leerte. Eres muy especial, querida "Julieta".
ResponderEliminarBesazos.
precioso poema,
ResponderEliminarcada vez me gusta mas como te expresas.
ciego soy,si no veo tu amor,
sordo dentro de tus silencios,
fluyo entre tus abrazos;
y salto igual que un sapo.
mandame un beso cielo,
a ver si cambio de aspecto.
un beso encanto
woooooooooooooooooooooooow kiero una novia como tu
ResponderEliminarprecioso!
ResponderEliminarCuando la lejanía se siente cerca, sólo nos queda depositar el sentimiento en la esperanza de que nuestras miradas hagan efecto y ésta vez sí se nos escuche.
ResponderEliminarUn abrazo fuerte, muah!
no se irá, no puede porque no está dentro de tí, sino porque es parte de tí
ResponderEliminar(el destino hace cosas que nos hacen muy felices)
te mando un superabrazo chica escritora
=)